Blog y diario digital del pueblo de Alcaine (Teruel) en Aragón (España). Un singular, pintoresco y tranquilo municipio situado en las estribaciones de la Cordillera Ibérica, en un marco natural incomparabl
Además del Nacimiento instalado en la iglesia (se va alternando cada año) y en la sala de espera del Consultorio Médico, este año por primera vez, se ha instalado un Belén en la sala multiusos de la Antigua Casa del Cura, cuyo portal ha sido realizado en gran tamaño por Cipriano Gil (acorde con las figuras, adquiridas de un mercadillo alemán por un vecino de Alcaine). Como es ya habitual, se ha iluminado el balcón del Ayuntamiento, y la Asociación de Mujeres La Solana ha colocado un buzón para echar las cartas a Papá Noel y se ha instalado el árbol de Navidad de 4 metros, con la estructura forrada de piezas de ganchillo elaboradas por dicha asociación. Igualmente, son varios los vecinos que han iluminado sus puertas o instalado pequeños Belenes en la calle junto a su casa.
También se ha recuperado otra era empedrada, con dibujo concéntrico, situada junto a la limpiada el año 2023
Hace casi un año que se celebraron con gran éxito en Alcaine, durante dos fines de semana, las I Jornadas de Arquitectura y Paisaje y en las que se reconstruyó un murete de piedra seca y limpió una era tradicional empedrada. Las jornadas fueron financiadas por el proyecto europeo Be.Cultour y la Diputación de Teruel, con la colaboración del Ayuntamiento de Alcaine y del Parque Cultural del Río Martín. Ya, durante el trabajo de esos días, se comentó la posibilidad de proseguir la tarea de limpieza y recuperación de otra era adyacente que conservaba el dibujo concéntrico de piedras. Así que, Parque Cultural del Río Martín (PCRM) y Ayuntamiento, fijaron esa futura tarea con un añadido importante: reconstruir un antiguo peirón allí situado (del que sólo quedaban restos de su basamento o pedestal) en honor a la Virgen del Rosario. Y durante varios días de la semana se procedió a limpiar las eras y a restaurar la segunda de las eras que no se pudo recuperar durante las jornadas citadas. Las mesas de picnic que estaban en la era y que afectaban a su empedrado tradicional, se han retirado para recolocarlas en otro punto del mirador. Tras la limpieza inicial de la era y desbroce de vegetación, se procedió a retirar la tierra sedimentada que ocultaba el empedrado original. Después se procedió a restaurar el empedrado en seco donde fue necesario, utilizando piedras de similares características a las utilizadas en su construcción. Los trabajos han sido incluidos dentro de las acciones de mantenimiento del Plan del Parque Cultural del río Martín de este año, con la financiación del Gobierno de Aragón (Departamento de Educación y Cultura. Servicio de Patrimonio Cultural), y con la participación del Ayuntamiento de Alcaine a través de los operarios municipales y personal del Parque Cultural del Río Martín.
En Alcaine se han llegado a contabilizar cerca de una docena de peirones. Los peirones o pairones son uno de los elementos de arquitectura que han estado más arraigados en la cultura popular de Aragón. Desde antiguo esos monolitos demarcaban límites territoriales o cruces de caminos con el añadido de un carácter religioso/supersticioso ya que la finalidad última era proteger al pueblo y sus gentes e incluso las cosechas. Y era el momento de recuperar el situado en ese barrio de Las Eras y reconstruirlo. Los dos operarios del Ayuntamiento han trabajado varios días en el peirón y ha sido levantado con 350 ladrillos macizos tradicionales, con la forma cuadrada (como otros similares, incluso existentes en otras poblaciones del Parque), y en dos de sus caras han sido colocadas dos baldosines con la imagen de la Virgen del Rosario (donados por un vecino) que, con fines de protección, miran hacia el camino y barrio de las Eras y la otra hacia el hoy pantano y antes fértil Huerta Baja. El peirón, de 3 metros de altura, está rematado en su parte superior con una cruz de hierro, bellamente realizada gratuitamente por el alcainés José Miguel Gil.
Chocolatada con porras y dulces, antes de la misa. Se coloca en su capilla un mástil con una bandera de 4 metros donada por una familia alcainesa
Continuando con la tradición, Alcaine celebró este viernes por la tarde -ya que el párroco Karol tiene varios pueblos en los que oficiar- la Misa en Honor a la Virgen del Pilar. Como es preceptivo uno de los actos del día era realizar la Ofrenda de Flores a la Virgen, y para ello un grupo de mujeres recolectó flores diversas en varias zonas del entorno de Alcaine, realizando una veintena de bonitos ramos que, sumados a los que portaban algunos fieles, se depositaron a los pies de la imagen de la Virgen situada en un lugar preminente del Altar, junto al acceso a la Sacristía. Este año, como bien se percató el párroco, fue más abundante la Ofrenda Floral.
Antes, en la sala multiusos de la antigua Casa del Cura, los vecinos organizaron una chocolatada con porras y dulces para todos los que acudieron a la publicitada cita vecinal. Desde allí, se acudió al oficio religioso en la Iglesia y se pudo observar el recién instalado mástil (realizado por Cipriano) y la bandera de 4 metros que ha regalado Miguel Ángel Quílez (familia con casa en San Ramón) para la capilla de la Virgen.
Se recupera una tradición.Más de medio centenar de asistentes, a pesar de la lluvia.
Hasta el último tercio del siglo pasado, cuando se celebraban las Fiestas en Alcaine, el Ayuntamiento pagaba los dos días preceptivos de fiesta (la Víspera y el Día del Santo) pero, si los mozos disponían de dinero pagaban ellos un día (el Día de la Abuela) o día y medio más, pagándole a algún músico del pueblo o de un pueblo cercano para amenizar esa jornada y las meriendas o cenas. Aprovechando esa tradición, desde hace unos años, se viene organizando una cena en grupo reducido y que este año se ha querido ampliar a todo el que quiera asistir. El éxito de la misma, anima a continuar con su celebración el próximo año. He aquí la crónica breve del evento:
Una tarde amenazante de lluvia, ha dado paso a partir de las 7 a un chubasco que ha dejado casi 7 litros a la hora a la que estaba prevista la cena. Con buen criterio ya se había decidido días antes celebrarla en la Sala del edificio del Albergue y no en la plaza. Más de medio centenar de personas ha acudido a la cita, aportando algún producto para compartir. Varias personas habían adquirido otras cosas de comida y bebidas, cuyo importe se ha pagado «a escote» entre todos los asistentes.En una mesa dispuesta a lo largo de la sala se han ido colocando los platos de empanadas, tortillas, oreja, embutidos, gambas, olivas, salpicón de marisco, croquetas caseras, tostas con varios productos, huevos rellenos, ensalada, calamares y rabas, pimientos fritos… y en otra mesa, atravesada al final de la sala, la sección de repostería con trenza de Almudévar, flanes caseros, lionesas, galletas, los Roscones (con nata añadida) de los portadores de la peana de San Agustín durante la procesión, y fruta (uva y paraguayos). La mayoría de los presentes estuvieron en la sala comiendo y departiendo e incluso varios permanecieron en el patio de acceso. Han sido unas horas pasadas en agradable compañía y al finalizar ya han empezado algunas despedidas porque se inician los viajes de retorno a las ciudades de residencia para retomar los trabajos o el cuidado de los nietos, etc. pero se ha hecho con la ilusión de un próximo reencuentro.
La Comisión (Peña Rezagados) cumple, y organiza unas FIESTAS QUE AGRADAN A TODO ALCAINE
A pesar de ser un grupo reducido, el ahínco, esfuerzo y trabajo que ha desarrollado la Comisión Rezagados, los ha llevado a conseguir dejar muy alto el listón de las Fiestas. Hay que agradecer también la ayuda de algunos compañeros de la comisión entrante (Beodos) que les han ayudado puntualmente en alguna de las actividades. Han sido unas Fiestas con una asistencia masiva de veraneantes, alcaineses y amigos que han acudido al pueblo para el reencuentro y el disfrute con familiares, amigos y peñistas. Y el objetivo se ha cumplido. Unas Fiestas pensadas para público de todas las edades y que han contado con concursos, talleres infantiles, carreras, discomóvil, bingo, parque infantil-hinchables, magia y humor, toro de fuego, juegos infantiles y de InterPeñas, Diablos, Disfraces, Ronda Jotera, el tradicional Baile del Farol, espectáculo de Jotas, Misa Baturra y traca Fin de Fiestas. Todas las actividades han contado con muy alta participación. Una vez más reconocer y agradecer el trabajo de la Comisión 2024 Rezagados.
Los autores, Cipriano Gil y JM Bespín, han seleccionado casi 300 fotos antiguas de la localidad y escrito textos sobre aspectos de la historia, indumentaria, escuelas, cuadrillas, familias, oficios y vida cotidiana desde inicios del siglo XX hasta hace 50 años
El Salón de Plenos del Ayuntamiento completó aforo para asistir a la presentación del segundo volumen de la colección Alcaine Vive-Vive Alcaine (que se inició el año pasado con la publicación del libro sobre el Tricentenario de la última reedificación de la iglesia). En este número 2 la temática ha versado sobre aspectos de la vida en el pueblo, desde hace más de un siglo, con especial énfasis en publicar casi 300 fotografías antiguas que Cipriano Gil ha ido recopilando, desde el año 2005 y cedidas por sus propietarios, sobre variada temática y que recogen momentos de la vida cotidiana y familiar de Alcaine.
El libro, de casi 200 páginas, cuenta con un prólogo de José Royo Lasarte (Hijo Adoptivo de Alcaine y director del Parque Cultural del Río Martín y del Centro de Arte Rupestre «Antonio Beltrán») y está estructurado en diversos capítulos, entre ellos: una breve descripción histórica del pueblo, los «retratistas» ambulantes que acudían en Fiestas a hacer fotos, las escuelas, las cuadrillas, labores y oficios, indumentaria, las Fiestas, el servicio militar, las minas, tradiciones religiosas, obras públicas y el embalse, así como una lista y fotos de las personas que residían en Alcaine en 1961… todo ello acompañado de textos sobre dicha temática. Ha sido ingente el trabajo de documentación para poder obtener datos de antes de la Guerra Civil (ya que se quemaron los archivos eclesiásticos y municipales) y muchas horas, para conseguir identificar -con nombre y apellidos- a la mayoría de las personas que aparecen en las fotografías.
Salvado de la quema en la Guerra Civil, al ser utilizado como puerta para un almacén de la Colectividad
Al inicio de la Guerra Civil en Alcaine, las imágenes y objetos religiosos fueron sacados de la iglesia de Santa María La Mayor y destruidos -junto con los archivos eclesiásticos y municipales- por el fuego de una hoguera encendida en la plaza. Pero hubo algunas cosas que, por su utilidad para los milicianos, fueron aprovechadas para otros usos. Así ocurrió con un retablo con ornamentación en estuco de yeso que, por su similitud, podría datarse de la misma época que el retablo del Altar Mayor: el año 1723. Se libró de la quema porque se decidió que podía ser útil para construir la puerta de un almacén/garaje que se construyó por los milicianos, junto a la carretera, a 1 km del pueblo. Con trozos del retablo de alguna de las capillas de la iglesia (con figuras y filigranas doradas sobre el estuco de yeso) se construyó la puerta, aunque se tuvo el detalle de poner la parte lisa y normal de la madera cara al exterior, para ocultarlo y posteriormente fue pintada. Acabada la guerra el edificio pasó a manos particulares y hace muchos años se cambió esa puerta por una metálica, quedando olvidada la puerta original -sensiblemente dañada por el paso del tiempo- al fondo del almacén, junto con variados utensilios y maderas.
El año pasado el alcainés Pablo Gil Pomar puso en conocimiento del hallazgo al Ayuntamiento y su decisión de donar los restos al pueblo por si se podían recuperar y utilizar. Tras el examen se decidió que, aunque sin suficiente valor para las instituciones al no estar íntegro y en buen estado, sí que lo tenía para Alcaine y que se podrían aprovechar algunas partes. Así, se procedió al traslado y a trabajar en el desclavado de las tablas que aún contenían restos y su limpieza. Tras un tiempo a la espera de tomar la mejor decisión, se decidió utilizar las partes con labrados visibles para exponerlas colgadas en la iglesia. Se ha procedido a instalar las tablas agrupadas en dos marcos, en las paredes del Coro de la iglesia. Tanto el párroco Karol Giraldo como Carlos Pardo, alcalde de Alcaine, expresan su “agradecimiento a la familia por la donación y a los que han colaborado, tanto en la recuperación como en la instalación”. Se ha decidido colocar también de forma permanente en ese recinto del Coro, las fotografías que se realizaron durante el proceso de restauración del retablo del Altar Mayor, para completar así ese espacio expositivo y que sea también más visitable.
Desde las 20:30 de la noche hasta el fin de fiesta, armonía, alegría y risas… ¡En Alcaine se disfruta!
Alcaine retomó la celebración verbenera pero esta vez en lugar de hacerlo en la plaza se realizó en la sala del edificio de la antigua Casa del Cura -ya con el aseo de la planta baja recuperado y en uso- y en la que participaron los vecinos que quisieron, ya que el evento anunciado estuvo abierto a todos. Como se había dicho se pidió que quien quisiera subiera algo para picar (se superaron las expectativas) y el resto se compró así como las bebidas y el material de menaje necesario (para eso eran los 5€ de aportación que se fijó)… como siempre se ha hecho… «a escote». Más de 30 personas se sumaron a la cena, que contó con un surtido completísimo de viandas: jamón, empanadas, albóndigas, embutidos, croquetas, ensaladas de variado tipo, pasta fresca, migas extremeñas, y hasta delicatessen de saquitos al horno de pasta filo con crema de bacalao o de jamón y queso, atados con tallo de perejil… que estaban insuperables. Tras ello, un completo plato de postre con diversos trozos de pasteles, flan y macedonia de fruta y cerezas fragatinas y después los preceptivos cafés o infusiones. Todo ello acompañado de agua, refrescos, y bebidas de todo tipo (vino, cava, licores variados) para cada pequeño grupo de las mesas. TODO FUE TAN ABUNDANTE QUE HASTA SOBRÓ y se llevó quien quiso. Al finalizar la cena, en la sobremesa, se cantó alguna jota por parte de los presentes y se dio paso al baile y las animadas charlas. En resumen, una excelente noche, en buena armonía y compañía… y dispuestos a repetir cuando se quiera.
Vicepresidente y consejeros del Gobierno de Aragón, Diputación, Comarcas, empresarios y personalidades culturales presentes en el acto de la firma
Este domingo ha tenido lugar, en el convento mercedario de Estercuel, la firma de constitución y estatutos de la Hermandad Amigos del Monasterio del Olivar. Han sido 85 socios fundadores los que han estampado su firma -ante notario- de constitución de esa fundación que parte como objetivo el de recuperar la asistencia masiva de romeros, hacer de ese enclave espiritual un foco social, cultural, empresarial y económico que impacte en el crecimiento del medio rural y también recabar aportaciones para el mantenimiento de un edificio con cinco siglos de historia. Los socios fundadores lo son a título particular, aunque muchos de ellos están ligados a instituciones públicas, sector financiero de Aragón, empresas, ámbito cultural, autoridades mercedarias y sociedad civil. Entre las autoridades asistentes: el vicepresidente del Gobierno de Aragón (Alejandro Nolasco), la Consejera de Presidencia, Interior y Cultura (Tomasa Hernández), el consejero de Medio Ambiente y Turismo (Manuel Blasco), varios alcaldes (entre ellos el de Alcaine, Carlos Pardo), además de personalidades como Manuel Pizarro (expresidente de Endesa), el presidente de Ibercaja (Francisco Serrano) y el exvicepresidente del Tribunal Constitucional (Eugenio Gay), directivos de SAMCA y del ámbito cultural, la pintora olietana Nati Cañada.
Tras esa firma efectuada a las 10h se ha realizado una visita guiada por el monasterio y a una exposición sobre el convento a lo largo de su historia. Tras ello, se ha realizado la Eucaristía, presidida por el arzobispo de Pamplona y Tudela (mercedario nacido en Alcorisa, Florencio Roselló). En un acto ceremonioso solemne se han entregado los títulos a los fundadores, se han impuesto las insignias y se ha presentado la junta rectora presidida por el muniesino José Mª Lomba. El Canto de la Salve a la Virgen del Olivar, con la Coral Alcorisana, ha cerrado el acto. Una comida de hermandad en el refectorio monacal a la que han asistido más de 120 personas ha sido el colofón de una jornada tan especial. En la tradición romera al convento participan vecinos de Estercuel, Gargallo, Crivillén, Obón, Alcaine, Cañizar del Olivar, La Zoma, Ejulve, La Mata de los Olmos, Alloza y Lécera (Zaragoza), entre otros. El monasterio funciona como hospedería, alquila apartamentos y tiene restaurante. Además, ofrece la actividad de observación del firmamento, cursos, encuentros y campamentos.
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