Un numeroso grupo de excursionistas de todas las edades de JORÉATE POR ARAGÓN, visitan Alcaine
Recorrieron los dos sectores de torreones medievales, mirador de San Ramón, caserío, la iglesia, nevera y embalse
Chesús Barrena lleva más de dos decenios recorriendo Aragón (ha visitado 1.758 pueblos aragoneses, contando 190 despoblados, y realizado más de 150 rutas por nuestra Comunidad) y es el creador de la web El cado de Chorche y el proyecto JORÉATE POR ARAGÓN, que él mismo define como «una manera fácil y práctica para invitar a la gente a descubrir Aragón y sus encantos, en busca de nuevos rincones que todavía no conozco, y que pueda compartir con todos aquellos que quieran conocer mejor esta tierra que no deja nunca de sorprender, con propuestas para que la gente pueda disfrutar de rincones de Aragón poco conocidos, pero de gran belleza. Lugares que no frecuentan muchos turistas, pero que tienen gran valor arquitectónico y paisajístico».
La doceava salida excursionista del grupo JORÉATE POR ARAGÓN, promovida por Chesús y realizada hace una semana, fue para conocer ALCAINE y Almonacid de la Cuba, siendo la más numerosa organizada hasta la fecha con una treintena de personas de todas las edades, y de la que ha publicado una extensa crónica en su blog.
En Alcaine, Cipriano Gil, recibió a los excursionistas acompañándolos a visitar la iglesia y la antigua nevera (pozo de hielo) y explicando detalles de esos puntos emblemáticos de nuestro pueblo. Recorrieron además los dos sectores de torreones medievales, el casco urbano, el antiguo lavadero, el mirador de San Ramón, y por la pista del río Martín se desplazaron al antiguo barrio de Las Eras tradicionales para observar el embalse de Cueva Foradada y el tamarizal de su cola.
Tras la comida campestre en la chopera del Prau, salieron de Alcaine en dirección a Almonacid de la Cuba para visitar la presa romana y su entorno patrimonial y paisajístico. La satisfacción y agradecimiento por la acogida que recibieron en ambas localidades, queda bien plasmada en dicha crónica sobre la visita escrita por Chesús Barrena y complementada con numerosas fotografías.
Apenas a los dos días, otro grupo diferente de una veintena de excursionistas llegaron a Alcaine, como punto final de recorrido de una ruta senderista.